jueves, 11 de julio de 2013

Sustentable… Sostenible…?


Al investigar todo lo referente a los conceptos de Sostenible y Sustentable, muchos autores lo usan indistintamente, aunque otros dan entrever que son sinónimos. Cómo si ambos tuvieran significados "parecidos pero diferentes", algo así como “entender” y “comprender”.

La verdad es que tienen connotaciones diferentes y deben ser usadas con propiedad; para ello, es preciso definir con claridad ambos conceptos de manera que sirva en la sistematización del conocimiento en estos aspectos tan importantes, y que juegan un rol trascendental en los planes y programas de negocios.

La palabra sustentable o el concepto de la sustentabilidad tiene que ver con el aspecto de “manutención”, que corresponde en un sistema a lo endógeno; es decir a todo lo que tiene que ver con el mantenimiento del sistema en cuanto a su permanencia en el tiempo. Y cuando hablo de lo endógeno me refiero a las debilidades y fortalezas que existen en un sistema en su ámbito interno.

En tal sentido, lo sustentable tiene que ver con las estrategias que se deben plantear para transformar las debilidades en fortalezas o mitigarlas, como también capitalizar al máximo las fortalezas. Lo endógeno o interno tiene que ver con las capacidades instaladas, la materia prima, la mano de obra, los intangibles y todo aquello que tiene ver con su propia existencia, desarrollo y crecimiento del sistema.

La palabra sostenible o el concepto de sostenibilidad. Etimológicamente nos lleva a “sostener”, implica, en el fondo, que alguien o algo externo o ajeno aparezcan en escena y “sostenga”. Por ello, lo sostenible se halla en el ámbito externo o exógeno a un sistema. Entonces tiene que ver con las oportunidades y las amenazas de un sistema para mantenerse en el tiempo. Es decir, trata de las estrategias que tengan que ver con el aprovechamiento de las oportunidades y la mitigación o prevención de las amenazas.

Dentro del ámbito externo se hallan, las políticas de gobierno, el clima, los tratados, la competencia, el mercado, el medio ambiente, etc.

Ambas, es decir lo sustentable (fortalezas y debilidades) y lo sostenible (oportunidades y amenazas) se proyectan al futuro y son interdependientes. Por ello, una buena estrategia tiene que ser sustentable y sostenible en el tiempo, pues ambas tienen que ver con los aspectos interno y externo de un sistema.