Los talleres de este tipo ayudan a desarrollar las capacidades de la gente.
El uso de la magia posibilita el desarrollo de las potencialidades de nuestro personal: su capacidad de comunicación, negociación y oratoria.
Al analizar el perfil de un mago, nos encontramos con muchas habilidades similares a las que un ejecutivo utiliza cotidianamente. Debe relacionarse a través de diversas herramientas. El uso de talleres de magia en las organizaciones permite trabajar habilidades de nuestro personal:
- Desarrollo de su capacidad de comunicación: mejora en la interrelación con sus equipos de trabajo y con los distintos públicos con los que debe mantener contacto.
- Oratoria: aprendizaje y desarrollo de las capacidades de discurso.
- Presentaciones efectivas.
- Mejora en la autoestima y seguridad personal.
- Manejo de situaciones de conflicto.
- Establecimiento de metodologías.
- Capacidad de negociación.
- Persuasión.
- Influencia.
Quienes nos desempeñamos especialmente en capacitación sabemos que el desarrollo de estas habilidades se puede trabajar mediante una variedad de talleres. Sin embargo, la utilización de la magia permite abarcar todas las capacidades en un solo curso.
¿Por qué la magia?
Cualquier mago profesional, y quienes hayan asistido un show confirmarán que un buen mago no sólo debe conocer los trucos y su técnica a la perfección, sino que debe tener ese “algo más” para atraer la atención de su audiencia y diferenciarse.
Contar con determinadas habilidades personales y emocionales les permite a los magos no sólo que los trucos no sean sólo trucos, sino que tengan un efecto en la gente, que generen sorpresa y además, entretengan.
Los magos deben captar la atención del público, mantenerla y recuperarla cuando se pierde; persuadir a través de técnicas de oratoria; tener la suficiente autoestima y seguridad personal como para pararse frente a su audiencia y manejar situaciones de conflicto; trabajar con los tonos de voz, la postura y la imagen; generar participación, etc.
Por otra parte, los magos deben ser metodológicos en su trabajo cotidiano para el armado del show, de la puesta en escena y del personaje. Además, recurren a técnicas de memorización que les permiten cumplir con sus presentaciones de manera efectiva y sin deslices.
Como verán, todo esto es muy útil al ámbito corporativo.